lunes, 29 de marzo de 2021

Primavera 2021

 

Buenas tardes, a todos los amigos de Internet.

Son casi las cinco y me preparo para tomar un té verde, con hierba buena y pétalos de azahar en compañía de mis orquídeas. Ha comenzado la primavera y toca disfrutarla. Un momento particular en la Naturaleza, en el que Deméter despierta de su letargo y nos vuelve a sonreír. El amanecer en las islas donde vivo es un lujo. Es mi pequeño paraíso dentro de un gran archipiélago, ubicado en medio del Atlántico, como es el de las Islas Afortunadas, las islas de los bienaventurados, Canarias.

El día comienza con el saludo a ellas, a las orquídeas. Un sencillo gesto -convertido casi en un ritual- del que mentiría si no dijera que me resulta muy gozoso poder llevarlo a cabo.

Como decía, por esta época la Tierra se cubre de un manto verde lleno de actividad y vida. Un motivo para reflexionar sobre la necesidad de tener los campos limpios de cualquier elemento que pueda dañarlos, particularmente si podemos transportarlos precisamente a un punto limpio para su reciclaje. ¿Acaso no nos gusta que nuestros montes se encuentren en buen estado y podamos disfrutar de ellos?

Considero que con el reciclado hacemos mucho cada día, para que la naturaleza sea más benévola con nosotros y pueda concedernos muchos más beneficios.  De lo contrario,  ¿qué primaveras les espera a las futuras generaciones? ¿Cómo podrían apreciar los diferentes colores de las estaciones si éstos no se produjeran? ¿Acaso no nos maravillan, las flores, los árboles, los pájaros, con su variada gama cromática de plumas, tan alegres con sus cantos a la primavera y el azul del mar?

Mi ilusión es ver y sentir los frutos de mis desvelos, que no es otro que el trabajo que justamente me dan las flores. Ellas me responden con su belleza, me transmiten su armonía, alegría, paz y energía. Esa que intento transferir a los demás. A este propósito dedico mis esfuerzos y parte de mi tiempo. Precisamente una de las cosas que considero entre las más valiosas que todos tenemos, sin él no somos nada... La vida es una elección. Hoy día solo se mencionan recursos económicos, se debate sobre la influencia de la pandemia en la sociedad y no se reflexiona en torno a aquello que nos perdemos, el milagro de la vida.

Siempre tengo la mente flexible para lo que me depare el destino, especialmente en esta etapa de la vida. A mis años las perspectivas son muy diferentes. Hoy me siento a gusto conmigo misma, con salud, con ganas de escribir, continuar con las lecturas, hacer galletitas, regalarlas…pero también planificando y viajando astralmente; ¡no nos engañemos! por ahora no se puede volar de otra forma, gracias a ese bicho que no vemos pero que está ahí...


Las orquídeas tienen vida propia. Las mimo, escuchan música a diario y adornan mi balcón en el espacio donde hago medito sobre el futuro. Lo más apreciado de mi hogar no es lo que se ve, sino lo que se SIENTE. Las buenas vibraciones y la energía a su alrededor.

Saborear el té verde ha sido muy relajante esta tarde en vuestra compañía. Volveremos a estar juntos a la misma hora. Las cinco. Pondré las pastas y prepararé el agua y ustedes la lectura.

Sean felices y no se olviden de la mascarilla. Tenemos que ser responsables con nuestros actos, ya que todo genera consecuencias. Como he comentado alguna vez, las malas energías  en su momento cobran vida y eso no nos gusta.